La incomprensión
Una de cada tres
personas que acuden al médico de cabecera tiene síntomas sin ninguna
explicación médica. Cuando esos pacientes llegan al neurólogo la cosa suele ser
grave. O’Sullivan decidió atender su sufrimiento y no enviarlos a casa. “No necesariamente
los mayores padecimientos reciben la mayor consideración y compasión. Hay una
clasificación no oficial para las dolencias y en ella los trastornos
psicosomáticos son los charlatanes de las aflicciones, nos burlamos de ellos.
Eso debe cambiar” . En Todo está en tu cabeza (Ariel), O’Sullivan recorre sus
más de veinte años de experiencia en el trato de esos síntomas que dejan a
personas postradas en sillas de ruedas o padeciendo violentos ataques de tipo
epiléptico.